Jareth
Molde: DOI Luke Dream of Doll
Nombre completo:
Desconocido
Desconocido
Edad:
30 años
Sexo:
30 años
Sexo:
Hombre
Fecha nacimiento:
Fecha nacimiento:
9 de Abril
Horóscopo:
Aries
Aries
Orientación sexual:
Hetero, MUY hetero
Hetero, MUY hetero
País/residencia:
Desconocido
Desconocido
Raza:
Mago ígneo
Mago ígneo
Estatura:
2’00 m
2’00 m
Color pelo:
Pelirrojo anaranjado
Pelirrojo anaranjado
Color ojos:
Verde claro
Verde claro
Manías:
Llevar siempre su ojo derecho tapado, ya sea por un parche o por el mismo pelo.
Llevar siempre su ojo derecho tapado, ya sea por un parche o por el mismo pelo.
Virtudes:
Virtuoso con la magia del elemento fuego, rara vez se le ve desanimado, cuando se fija un objetivo no hay quien lo convenza de lo contrario, aunque esto a veces pueda ser más algo malo que algo bueno
Virtuoso con la magia del elemento fuego, rara vez se le ve desanimado, cuando se fija un objetivo no hay quien lo convenza de lo contrario, aunque esto a veces pueda ser más algo malo que algo bueno
Defectos:
Muy cabezota y fácil de enfadar cuando sabes cómo, suele durarle mucho el mal genio cuando se enfada.
Muy cabezota y fácil de enfadar cuando sabes cómo, suele durarle mucho el mal genio cuando se enfada.
Color favorito:
Rojo
Rojo
Aficiones:
“Nada mejor que un trago de sake mientras tienes entre tus brazos a una mujer”, como él diría.
“Nada mejor que un trago de sake mientras tienes entre tus brazos a una mujer”, como él diría.
Estudios/profesión:
Desconocidos. Actualmente tiene grado mágico alto.
Desconocidos. Actualmente tiene grado mágico alto.
Un poco sobre él:
Mago viajero del que se desconoce todo sobre su pasado, así como el objetivo de sus viajes por el mundo. Su elemento es el fuego, aunque rara vez se le ve utilizando magia, tan solo cuando muestra sus trucos mágicos en los pueblos y ciudades durante sus viajes, con los que se gana la vida.
Años atrás mientras viajaba se topó con un pueblo destruido y para su sorpresa, encontró a la única habitante con vida aunque muy débil, una niña de apenas unos 10 años que sin saber cómo, había sobrevivido a lo que pasara en aquel lugar. Aquella niña, Ophelia, resultó ser una pequeña bruja con poderes muy especiales.
Aunque en aquellos días sabía que no era el más indicado para cuidar de una niña tan pequeña, no tuvo más opción; por lo que durante años cuidó de ella como un padre y le enseñó todo lo que conocía sobre la magia .
Jareth siempre fue un mujeriego, nada le gustaba más que pasar la noche con una mujer (o con varias si se le presentaba la ocasión, para que mentir), pero desde que Ophi estuvo a su lado aprendió a controlar sus malos hábitos, pero algo que nunca pudo abandonar del todo fue su gusto por las mujeres y la bebida, un problema que le pasó factura años después, ya que esto a Ophi no le hacía ninguna gracia.
Sin embargo, aquella situación empezó a cambiar cuando Ophi empezó a comportarse como una joven celosa y, para pesar de él, enamorada. Cuando se dio cuenta de esto la rechazó sin remedio, tenía muchas razones que le hacían pensar así, por mucho que la quisiera. Además, sabía que si seguía mucho tiempo más a su lado acabaría haciéndole mucho daño, él tenía un destino que cumplir…y prefería hacerlo solo para que nadie lo acompañase y sufriese por su culpa.
Pero era de mentalidad débil, y las continuas indirectas de ella acabaron por cambiar su forma de pensar, ese sentimiento de padre sobreprotector acabó cambiando en otro diferente…comprendió que la quería y que no quería dejarla marchar, en manos de nadie más que no fuera él, por lo que una noche no pudo resistirse más y se abandonó a esos nuevos sentimientos, correspondiéndola.
Pero aquello no estaba bien, no para su razón, ni siquiera sabía cuánto tiempo le quedaba…y aunque le doliese, creía que iba a ser mucho peor si esperaba más tiempo, por lo que a la mañana siguiente al despuntar el alba, desapareció sin dejar rastro del lugar, ya que no podía darle ninguna explicación a Ophi sin hacerle más daño aún.
Durante los años siguientes nada se supo de él, siguió buscado “aquello que quería encontrar” sin nadie a su lado, aunque casi perdía la esperanza de poder encontrar aquello…cuando un día, sin previo aviso, volvió a encontrarse con aquella joven de la que estaba enamorado desde años atrás, acompañada de un príncipe y sus compañeros, que venían con una propuesta un tanto extraña…pero algo en todo aquello le llamó la atención, recordándole algo que pasó muchos años atrás y que despertaba un profundo dolor en su ojo derecho de tan solo acordarse, sin embargo no tuvo más opción que aceptar, ya que algo le decía que con ellos encontraría por fin lo que tanto buscaba…
Años atrás mientras viajaba se topó con un pueblo destruido y para su sorpresa, encontró a la única habitante con vida aunque muy débil, una niña de apenas unos 10 años que sin saber cómo, había sobrevivido a lo que pasara en aquel lugar. Aquella niña, Ophelia, resultó ser una pequeña bruja con poderes muy especiales.
Aunque en aquellos días sabía que no era el más indicado para cuidar de una niña tan pequeña, no tuvo más opción; por lo que durante años cuidó de ella como un padre y le enseñó todo lo que conocía sobre la magia .
Jareth siempre fue un mujeriego, nada le gustaba más que pasar la noche con una mujer (o con varias si se le presentaba la ocasión, para que mentir), pero desde que Ophi estuvo a su lado aprendió a controlar sus malos hábitos, pero algo que nunca pudo abandonar del todo fue su gusto por las mujeres y la bebida, un problema que le pasó factura años después, ya que esto a Ophi no le hacía ninguna gracia.
Sin embargo, aquella situación empezó a cambiar cuando Ophi empezó a comportarse como una joven celosa y, para pesar de él, enamorada. Cuando se dio cuenta de esto la rechazó sin remedio, tenía muchas razones que le hacían pensar así, por mucho que la quisiera. Además, sabía que si seguía mucho tiempo más a su lado acabaría haciéndole mucho daño, él tenía un destino que cumplir…y prefería hacerlo solo para que nadie lo acompañase y sufriese por su culpa.
Pero era de mentalidad débil, y las continuas indirectas de ella acabaron por cambiar su forma de pensar, ese sentimiento de padre sobreprotector acabó cambiando en otro diferente…comprendió que la quería y que no quería dejarla marchar, en manos de nadie más que no fuera él, por lo que una noche no pudo resistirse más y se abandonó a esos nuevos sentimientos, correspondiéndola.
Pero aquello no estaba bien, no para su razón, ni siquiera sabía cuánto tiempo le quedaba…y aunque le doliese, creía que iba a ser mucho peor si esperaba más tiempo, por lo que a la mañana siguiente al despuntar el alba, desapareció sin dejar rastro del lugar, ya que no podía darle ninguna explicación a Ophi sin hacerle más daño aún.
Durante los años siguientes nada se supo de él, siguió buscado “aquello que quería encontrar” sin nadie a su lado, aunque casi perdía la esperanza de poder encontrar aquello…cuando un día, sin previo aviso, volvió a encontrarse con aquella joven de la que estaba enamorado desde años atrás, acompañada de un príncipe y sus compañeros, que venían con una propuesta un tanto extraña…pero algo en todo aquello le llamó la atención, recordándole algo que pasó muchos años atrás y que despertaba un profundo dolor en su ojo derecho de tan solo acordarse, sin embargo no tuvo más opción que aceptar, ya que algo le decía que con ellos encontraría por fin lo que tanto buscaba…
Datos de interés:
*Su voz suena como la de Gackt Kamui, cantante y actor japonés.
* Nadie sabe que oculta bajo el parche de su ojo derecho, lo que sí se sabe es que Jareth nunca lo deja al descubierto .
*Se ha ganado una gran fama por los burdeles de las grandes ciudades, además de una buena amistad con la mayoría de sus chicas, a tal punto de que en algunos lo dejan entrar gratis, ya que “nos paga tan solo con su compañía, jamás tuvimos tan buen cliente”, o eso dicen.
*Le regaló a Ophi un colgante de llama petrificada, un extraño material que solo los grandes clanes mágicos podían conseguir.
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